Como vimos en el artículo anterior,
son muchos los beneficios del ajedrez
para nuestra mente; bueno, en
general, cualquier juego de estrategia
tiene aspectos positivos.
Por seguir un criterio en su
clasificación, vamos a agruparlos en
tres grandes apartados: beneficios
intelectuales, sociales y en el
carácter.
A) BENEFICIOS INTELECTUALES:
1. Eleva el coeficiente intelectual y potencia la
memoria.
2. Se ejercitan ambos hemisferios cerebrales.
3. Ayuda a resolver problemas, ya que
desarrollamos el razonamiento lógico -
matemático.
4. Favorece la atención y la concentración.
Podemos ignorar todo lo que ocurre a
nuestro alrededor, poniendo toda nuestra
atención en la partida.
5. Mejora la creatividad, la imaginación y la originalidad, ayudando a tomar decisiones
más rápidas y precisas en momentos de presión.
6. Enseña a planificar y a hacer previsiones. Desarrollan la corteza prefrontal, responsable
de la planificación, del autocontrol y, por supuesto, implicada en la toma de decisiones.
En una partida, los jugadores necesitan responder a la jugada del contrario, por lo que
tiene que analizar los posibles respuestas y elegir la más apropiada.
7. Relacionado con la mente, hay estudios que han demostrado que evita enfermedades
como el Alzheimer u otras que suponen un deterioro mental. Cuanto más ejercitemos el
cerebro, éste envejecerá más despacio.
B) BENEFICIOS EN EL CARÁCTER:
1. Mejora la inteligencia y el control emocional,
sabiendo controlar los éxitos y la frustración.
No nos podemos dejar llevar por la ira. Con
el ajedrez aprendemos a controlar las
emociones.
2. Mejora la responsabilidad ya que no se
puede echar la culpa a nadie de un
movimiento fallido. Aprenden a reconocer
sus errores y a aprender de ellos.
3. Mejora la autoestima, el esfuerzo para
conseguir lo que se propone, consiguiendo
más confianza en sí mismo.
4. Otras cualidades que se benefician del
ajedrez es la honestidad y la empatía
(comprender al oponente durante el juego)
1. Como todos los deportes, el ajedrez
tiene unas normas que hay que
aprender y aceptar.
2. Nos enseña a aceptar el resultado,
tanto si se ha ganado como si se ha
perdido. No es un deporte de fuerza,
gana el que mejor ha jugado.
3. Nos prepara para aceptar otros
puntos de vista.
Después de todo, sólo nos falta empezar
A JUGAR Y A DISFRUTAR
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